Si has llegado aquí seguramente anhelas tener más amigos hombres en tu vida.
Si estás leyendo esto es porque yo también me he sentido muy solo en muchos momentos de mi vida.
Para cambiar esta situación me propuse crear yo la comunidad de hombres a la que me habría gustado pertenecer.
Como no existía ninguna que resonase con mis valores, tuve que crearla.
Actualmente, sólo está disponible para mis clientes de mentorías 1 a 1 y para miembros del Programa Vivir Sin Parches.
Es una comunidad en la que no tienes que dañarte para pertenecer.
Los hombres a los que conocerás al entrar están comprometidos consigo mismos y con su salud: cuidan su alimentación, no beben alcohol ni fuman, entrenan, no ven porno ni se masturban buscando huir del dolor…
Son hombres emocionalmente disponibles, hombres que han mirado dentro, que están haciéndose responsables de su vida, que han entendido su historia y por qué son como son.
Estamos trabajando en nuestra mejor versión.
Juntos reímos, lloramos, nos abrazamos, bailamos, cantamos, nos miramos a los ojos y no nos juzgamos.
Los círculos de hombres o la terapia suelen ser una vez a la semana o cada 15 días, son muy útiles, pero en ciertos momentos del camino no son suficiente. Lo que necesita cualquier persona para sanar es una Red de Apoyo.
Red de apoyo
La hermandad es un espacio en el que avanzar en el camino junto a otros compañeros que comparten intereses, metas y propósito.
Somos seres sociales, necesitamos relaciones nutritivas para encontrarnos tranquilos y poder hablar con personas cuando lo necesitamos.
Pertenecer a una red de apoyo masculina te ayudará a desarrollar una masculinidad más sana en un mundo hostil para el hombre.
Creo que el objetivo de cualquier terapia debería ser dejar de acudir porque te has creado una serie de relaciones que te aportan, te nutren, te entienden… a los que no hace falta pedir permiso para llamar. Hombres que están disponibles para ti.
Las personas que hemos nacido en familias disfuncionales tenemos más dificultad con esto, nos cuesta más poner límites, expresar nuestras necesidades o tener espacios seguros en los que poder quitarse la coraza.
Si sientes que ha llegado el momento de rodearte de hombres sanos, considera reservar una sesión 1 a 1 conmigo o entrar al Programa Vivir Sin Parches.